PRESIÓN EN LLANTAS O NEUMÁTICOS ¿QUÉ PASA SI ESTÁ SOBRE INFLADA?

La mayoría de las personas no tienen idea de cuál es la presión correcta para sus llantas. Incluso, ni siquiera lo toman en cuenta y van por la vida circulando con la presión inadecuada; ignorando todo el daño que pueden producirle a su auto.

Y no, unas pataditas en las llantas no te dirán sí la presión es correcta. Lo ideal es usar los medidores de presión, también conocidos como calibradores y la mejor noticias es que los encuentras como llaveros.

Te recomendamos seguir las recomendaciones del fabricante, normalmente los encuentras en la puerta o el manual. ¡Y mucho cuidado! tenerlas demasiado infladas no es la solución. Te compartimos las desventajas de la presión alta y baja.

DESVENTAJAS Y PROBLEMAS DE CIRCULAR CON LA PRESIÓN INADECUADA:

PRESIÓN ALTA EN LLANTAS:

  • Desgaste del neumático

La presión excesivamente alta (y baja) desgasta de forma irregular la llanta, en este caso por la parte central de la llanta.

  • Agarre

Con la presión alta la llanta pierde agarre con la carretera. Esto aumenta las probabilidades de provocar un accidente en caso de un frenado inesperado.

  • Confort 

Debido a la posición de la llanta, la cual forma parte de la suspensión del automóvil, tenerla sobreinflada la vuelve rígida; aumentando el impacto negativo con las irregularidades del camino. 

PRESIÓN BAJA EN LLANTAS

  • Calentamiento de llantas

En este caso las llantas alcanzan una temperatura más alta, degradando sus elementos y provocando desprendimientos internos e incluso aumentando el riesgo de explosión.

  • Distancia de frenado 

Con una presión baja de llantas la distancia de frenado debe ser mayor, lo que nos indica que no podremos reaccionar de manera inmediata ante un descuido y esto, claramente aumenta el riesgo de accidente. 

  • Deformación rápido de las llantas

Sin la presión adecuada de tus neumáticos, sobrecargas la banda de rodamiento y se reduce un 30% la vida útil de tus llantas. 

CÓMO PONER LA PRESIÓN CORRECTA A TUS LLANTAS

Siempre es recomendable seguir las indicaciones del fabricante. Y estas instrucciones las encontrarás en la puerta del piloto o tanque de gasolina.